Sofríe cada ingrediente en mantequilla hasta que estén dorados y colócalos en una olla grande.
Cocina la pechuga de pollo, desméchala y agrégala a la olla.
Añade un poco de caldo y la salsa de tu elección.
Revuelve bien y cocina a fuego muy lento durante 45 minutos, sin dejar de remover.
Sirve caliente y disfruta.