Frota el lomo con sal, pimienta y romero, y colócalo sobre una cama de tocino en una fuente para horno.
Cubre la carne con más tiras de tocino, asegurando que quede bien envuelta.
Tapa y refrigera toda la noche para que se impregnen los sabores.
Al día siguiente, precalienta el horno a 200 °C y hornea la carne durante una hora.
Deja reposar diez minutos antes de cortar en lonchas.
Recoge el jugo de la cocción y espésalo con maicena para servir como salsa.
Acompaña con papas doradas y espárragos para un plato completo.